Actividades
Observación y registro: Llevar un diario o cuaderno donde los niños puedan registrar observaciones de cambios climáticos, como la lluvia, el viento, o incluso la formación de charcos después de la lluvia.
Excursiones al aire libre: Organizar salidas para observar la naturaleza en acción. Puede ser visitar un río, un parque o incluso una montaña si es posible, para que los niños experimenten los fenómenos naturales en su entorno.
Juegos: Crear juegos que simulen fenómenos naturales, como un juego de roles donde algunos niños representen ser nubes y otros el sol para entender la formación de la lluvia.
Manualidades: Realizar manualidades relacionadas, como crear maquetas de volcanes o armar un modelo del sistema solar, pueden ayudar a visualizar y comprender mejor estos fenómenos.